Misa de los 6tos. años de la secundaria
31 mayo, 2024
Encuentro Pentecostés Joven
31 mayo, 2024

Con mucha alegría celebramos las fiestas patronales de nuestra diócesis. Una gran cantidad de
fieles partió desde la Catedral en procesión por las calles de San Isidro junto a las imágenes de San Isidro Labrador y la de su esposa, Santa María de la Cabeza.
Al finalizar el recorrido, el obispo monseñor Oscar Ojea presidió la eucaristía que fue
concelebrada por el Obispo coadjutor monseñor Guillermo Caride, el Obispo auxiliar monseñor Raúl Pizarro, el párroco de la catedral Pbro. Carlos Avellaneda y sacerdotes presentes.
En su homilía Ojea expresó: “Muchas veces hemos puesto de relieve en este gran santo laico, que es nuestro patrono san Isidro, su capacidad para integrar distintos aspectos de la Vida Cristiana. La oración, el trabajo, la vida familiar, la atención a los pobres; incluso las
tradiciones populares se encargaron también de sostener que san Isidro podía hacer muchas cosas, que el tiempo le daba para todo, y en realidad, el secreto de esto, es esta capacidad para permanecer en Jesús, el amor que fue la columna vertebral de su vida y que le permitió dar fruto, dar frutos de santidad”. Haciendo referencia a la esperanza del labrador, puntualizó : “La esperanza, esta virtud que está en la convocatoria del año Santo, próximo al año 2025, peregrinos de esperanza, es tan necesaria en el momento que estamos viviendo hoy después de haber sido castigada la humanidad en los últimos años por la pandemia en la que murieron
millones de personas, ha aparecido la guerra de un modo cruel y al mismo tiempo las enormes dificultades económicas, sociales; todo esto ha llevado y ayuda a un clima de desaliento de tristeza de falta de esperanza, es una suerte de conspiración contra la esperanza”.
En tal sentido, el Obispo agregó “Si nosotros no podemos trabajar con la esperanza y con la paciencia es imposible la construcción de la paz y este es el gran Don que tenemos que pedirle a nuestro Santo en este día”.
Al finalizar su homilía, invitó a los fieles a pedir al santo que podamos ser constructores de la paz: “tenemos que ubicarnos frente a lo real ejercitando la esperanza, la paciencia y pidiéndole en el día de hoy a este gran Santo a que podamos ser constructores de la paz, de esa paz que se hace con tiempo, con paciencia, de una paz que se madura, de una paz que se hace con reflexión, con valoración y con conversación”.